Hay dos maneras de enfrentar nuestras situaciones complicadas. No sé que tipo de situación tu estás viviendo. Puede ser enfermedad terminal, desempleo, enfermedad por Corona Virus. O tal vez luto o divorcio en tu vida. Y probablemente te sientes miserable, sin esperanza y muy confundido. Pero cada situación tiene dos lados.
Esto me recuerda la historia de un vendedor de zapatos que fue enviado a vender zapatos en una isla de aborígenes. Después de tres días en la isla, escribió un correo a su jefe: «Imposible vender zapatos, todos están descalzos». Y añadió: Me regreso mañana. Una vez llegado a la sucursal. El gerente envió otro vendedor a la misma isla. El 2 vendedor a los tres días escribió: excelente oportunidad de ventas todos están descalzos. Envíeme los pedidos.
¿Cuál fue la diferencia? La manera en que enfrentaron la situación. Uno la vio como víctima y el otro como vencedor. Y esa son las dos formas en que podemos como cristianos enfrentar las dificultades. Y es que estaba observando la manera en que el enemigo me quiere desanimar de mi futuro. Lo veía en la manera en que Goliat utiliza por lo menos cuatro estrategias para que me de por vencido y no obtenga la victoria en mi vida. 1 Samuel 17:44. Lo primero el enemigo establece tu ubicación. El texto dice “el filisteo miró y vio”. Esta acción es de una mirada de análisis y con detenimiento. dijo Goliat a David”. El enemigo sabe quien eres, de dónde vienes, lo que eres por lo menos en el ámbito natural. Lo segundo es que el enemigo distorsiona tu condición. El pasaje dice que “le tuvo en poco”. Nunca el enemigo va a hacer que tu valor suba, siempre te va a tratar de minimizarte para destruirme. Lo tercero es que el enemigo personaliza tu confrontación. Observa usted que el texto dice dos veces “dijo el filisteo a David”. El enemigo sabe como enviar mensajes personales para desanimarnos. Incluso conoce nuestro nombre y condición, y buscará enviar mensajes que destruyan nuestra confianza en Dios. Y cuarto es que el enemigo controla tu situación. Te hace creer que tiene dominio sobre ti. Le dice Goliat a David “ven a mí”. El está tratando de tomar el control y hacerte creer que tu destino es miserable y trágico. Que estás destinado a ser un perdedor. Observe como le vaticina a David que le iba a dar las su carne a las aves del cielo y a las bestias del campo. Goliat le vaticina un desastre de futuro a David por intentar enfrentarlo.
¿Cómo enfrentó David esta situación y ataques del enemigo? ¿De que manera se sobrepuso a las insinuaciones de Goliat y pudo ser un vencedor en las manos de Dios?
En cuanto al ataque a su ubicación, es interesante que David contrataca diciendo que lo importante es la ubicación bajo Dios. El vrs. 45 David hace ver bien claro que ni la ubicación de Goliat ni la de David es tan importante como estar bajo la ubicación de Dios. Para esto usa una declaración del poder de Dios. Dice “Jehová de los ejércitos, Dios de los escuadrones de Israel”. David no le preocupa que el enemigo quiera destruir su ubicación y hacerlo dudar porque el sabe que está bajo la ubicación de Dios. No estás solo, estás bajo la cobertura de Dios, así que confía.
En cuanto al ataque a su condición, es interesante que David contrataca diciendo que lo importante es la condición que procede de Dios. El vrs. 46 dice “Jehová entregara hoy en mi mano y yo te venceré”. Para esto usa una declaración del plan de Dios. Aunque el enemigo quiera rebajarnos o hacernos de menos con palabras, ideas o personas simplemente nuestra condición no es tan importante como estar bajo las condiciones de Dios. Aunque realmente tengamos problemas en Dios somos más que vencedores.
En cuanto al ataque a su confrontación, David contra ataca diciendo que lo importante es la confrontación contra Dios. Uno de los más grandes errores que el enemigo puede hacer en pensar que nos defendemos solos o que cuando nos confronta es a nosotros quien nos está confrontando. El vrs. 45 David dice “a quien tu has provocado”. Esta expresión es muy interesante porque habla de menospreciar, desafiar, poner en peligro, criticar. No es con David el problema, el problema es con Dios y cuando eso ocurre nosotros sólo somos instrumentos de su victoria. Para esto usa una declaración del problema de Dios.
En cuanto al ataque de su situación, David contra ataca diciendo que lo importante es la situación de Dios. Observe que el dice “y el os entregará en nuestras manos”. No es que nosotros caeremos en manos de Goliat, es el al revés es el momento en que Goliat caerá en nuestras manos. Para esto usa una declaración del pensamiento de Dios. Dios no piensa como el enemigo, el tiene un pensamiento de bien para nosotros y no dejará que el enemigo altere la situación que Dios tiene controlado.
Es importante pensar en algunas aplicaciones pertinentes que pueden desprenderse del pasaje y del que todos debemos estar alerta.
Primero, Satanás te conoce bien. La Biblia nos dice que Goliat miró a David de arriba para abajo. Usted ve, cuando David obedeció a Dios al moverse hacia el gigante, despertó la atención de Goliat. Del mismo modo, cuando empiezas a seguir a Dios, despiertas La atención de Satanás. Tal vez nunca has sido consciente del diablo antes. Hoy en día mucha gente ni siquiera cree que existe. Pero Satanás está encantado cuando alguien dice: ‘No creas en un diablo personal’, porque eso demuestra que tiene éxito con ellos.
Segundo, Satanás actuará si te mueves en la dirección de Dios. Sin embargo, usted no estará verdaderamente consciente del diablo hasta que moverse en la dirección de Dios. Jonathan Edwards solía decir, ‘Cuando la iglesia se reaviva, también lo hace el diablo, y cuando nos convertimos en cristianos, Satanás comenzará a atacarte. Una vez que David se movió en una dirección que amenazaba los intereses de Goliat, se dio cuenta de él.
Tercero, Satanás te odia. Mira de nuevo el versículo 42: Miró a David y vio que era sólo un niño, rojizo y guapo, y lo despreciaba (1 Sam. 17:42). ¿Tienes idea de cuánto te odia Satanás? Él te odia inmensamente. Te odia porque quiere mantenerte ciego y atado; quiere que pierdas tu alma y vayas al infierno (2 Co.4:4). Sin embargo, tratará de camuflar ese odio. Él tratará de adormecerte y dormirte y te hará pensar que todo está bien; te tentará con el brillo de este mundo para evitar que sigas a Jesucristo. Pero una vez que te conviertas en cristiano, descubrirás cuán profunda es su hostilidad. Su odio por ti será tan grande, que no podrá contenerlo. Y cuando Goliat vio a David, rugió: «¿Soy un perro, que vienes a mí con palos?». (v. 43). Satanás está lleno de orgullo, y así era Goliat. Se enfureció al ver a David, un mero joven, acercándose a él sin armadura, llevando sólo un bastón y un cabestrillo. El versículo 43 nos habla de su reacción: Maldijo a David por sus dioses (v. 43). Al igual que Goliat, Satanás muestra su odio por el lenguaje que utiliza. Cuando alguien se convierte, el Espíritu Santo le dará un nuevo vocabulario que será de paz y fe.
Cuarto, Satanás te victimizará. El enemigo sólo reacciona cuando es amenazado: ‘Ven aquí’, dijo, ‘y voy a dar su carne a los pájaros del aire y las bestias del campo'(v. 44). A pesar del hecho de que Goliat vio que su oponente era sólo un joven, se sintió incómodo cuando David se acercó a él, por lo que trató de hacerle temer y que sintiera víctima. Del mismo modo, cada vez que Satanás se agita, es una señal de que usted está haciendo algo bien, y él espera que haciéndote temer, darás marcha atrás. Así que cuando estás caminando con Dios, él te amenazará con destruirte. Pero está mintiendo. David no dejó que el enemigo le metiera la idea de que su vida era una víctima. No estaba destinado a ser victimizado sino a ser vencedor. Recuerden, sus tácticas son trabajar a través del miedo y las mentiras. Jesús estará contigo y él te protegerá no le creas al enemigo que ere una víctima de las circunstancias, de la vida y de las otras personas. Eres más que vencedor en Cristo Jesús.